...ADIOS...

Mosaicos negros con contrastes de otros blancos adornaban las paredes de aquel baño, deslizando la espalda por la puerta hasta llegar al borde del suelo, deja su cuerpo caer atraído por la gravedad. Sus ojos miran fijamente a lo que tiene en su mano, en la otra aprieta algo con fuerza, sonríe.

Golpes…puede sentirlos del otro lado de la puerta, ya no escucha, aunque todavía siente… quiere dejar de sentir, otra noche, otro segundo mas.

Temeroso pero ansioso, toma entre sus dedos la jeringa, y desliza, enredando la liga a su brazo, marcando sus venas.

-“¡Sal de ahí Bill!”—

¿Por que sigues ahí? Se preguntaba el pelinegro, con lágrimas en sus ojos, secando poco a poco su alma. Siempre le ha temido a las jeringas, pero seria su única evasión posible, no quería morir, pero tampoco quería vivir, estar en el limbo.

Libre…libre.

Sucesivas imágenes pasaron por la mente del pelinegro, haciendo en su rostro una mueca de indescriptible dolor, otra vez sus ojos lloraron inevitablemente. La aguja ya estaba dentro de el, pasando a sus venas para que la música empezara a sonar, una lluvia de melodías… unas gotas de olvido.

Libre…

Distorsionándose todas las figuras, todos los objetos alrededor se hacían humo, al igual que el dolor… ahora se hacia una grandiosa comedia… sonríe.

Se levanta entre las líneas que forman figuras sin descripción.

A la nada volver… nada vuelve por mi… nada envuélveme… para siempre.

De las líneas garabateadas alrededor de el, se formo la figura de su hermano abrazándolo.

Pero su esencia lo rodeaba y formaba miles de colores alucinantes. El arco iris parecía ser la luz de sus ojos. Pronto la melodía es cortante, cada nota es una navaja para cada parte del cuerpo… pero el pelinegro sigue soñando.

Nada… ven por mí.

La figura parecida a Tom, empieza a tocar a Bill –“Perdóname hermano”—Le dice el que supuestamente es Tom, Bill empieza a ver todo color negro, mirándose solo a si mismo con algo de luz, luego solo escucha sonidos que no puede reconocer y de su boca sonidos incoherentes, sin formar alguna palabra, solo sonidos.

-“¡Bill! ¡¿¿Que has hecho??! ¡Respóndeme!”—Le gritaba Tom al pelinegro que estaba recargado en una de las paredes del baño, bill solo hacia ruidos que salían de la herida de su rostro.

-“Que… ¿que es esto?.. ¡¿Te estas drogando bill?!”—Tom agitaba sin ningún efecto a Bill que parecía que solo su cuerpo estaba presente, y lo demás de el, estaba perdido en algún otro lugar, al que Tom no podía llegar.

-“Maldición, ¿por que lo has hecho?”—Bill de pronto cayó al suelo, cerrando sus ojos y con la respiración agitada

-“¡¡BILL!!—Cargando a Bill, Tom grito a sus amigos para que llamaran a algún lugar…pero pensó, ¡¿que seria de todos los que se enteraran?! Eran figuras publicas y no podían darse el lujo, -“¡Llamen a alguien! ¡Que venga aquí un doctor!”—Coloco a su hermano gemelo en su cama, toco su frente… estaba ardiendo en fiebre, corriendo mojo un pañuelo, poniéndolo en su frente.

Unos momentos después, llego el doctor a aquella habitación, reviso a Bill, dijo que estaría bien, era un efecto secundario de la droga que se había suministrado. Tom pago lo necesario al doctor mientras que sus otros dos amigos, vigilaban que Bill estuviera estable.

Tom se acerco hasta aquella cama, enojado de que su hermano hiciera ¡una tontería como esa! No tanto por lo de su reputación y todas esas tonterías, sino por el mismo… se estaba haciendo daño, puso una silla junto a la cama, y se sentó a observar a su hermano, sumergido en algún sueño sicodélico.

El pelinegro empezó a moverse, al menos un poco, de sus parpados cerrados empezó a brotar un poco de agua –“¿Puedes…mirarme ahora?”—Menciono el pelinegro mientras seguía con sus ojos cerrados, luego… se mantuvo quieto.

-“Por que razón… hizo esto Tom?”— Pregunto Georg mirando preocupado a los gemelos, en los meses anteriores, ellos habían estado algo separados, y ya no se hablaban como antes.

A quien iba dirigida la pregunta, solo se quedaba con la mirada fija en su hermano menor, después mirando hacia otro lado.

-“no nos vas a contrastar Tom? Tenemos que saberlo, tal vez sea cosa de ustedes... pero a nosotros también nos importan, ¡y mucho! Por favor….habla”—Le pidió Gustav parándose de donde estaba sentando, hasta estar de lado de Tom.

-“Realmente lo ignoro”—Dijo Tom parándose de la silla, tomando el trapo para mojarlo, fue al lavabo del baño en donde el pelinegro se había encerrado.

-“Antes de que esto pasara…escuche que los dos gritaban”—Dijo Georg después de un largo suspiro y cruzando sus brazos, mirando hacia donde se había dirigido Tom

-“Eso fue por algo que no tuvo importancia… no se porque hizo esto, en serio”—Acabo diciendo Tom, que estaba ocupado exprimiendo el trapo, volviéndose a su lugar, colocando el pedazo de tela donde antes estaba.

-“Si tu no quieres decirnos…tal vez bill lo haga”—Dijo Georg mirando otra vez a Bill

Y ahí se quedaron los tres…hasta la mañana siguiente, en la que despertaron… y el pelinegro ya no se encontraba.

Una gota cae en un charco…

Sus ojos se posan en las ondas que marca cada gota que cae…

Las gotas de lluvia se fundían con las salidas de las penas de su alma… se sentía tan mal… se odiaba a si mismo, se sentía tan enfermo, no tenia lugar a donde ir, ni a donde volver, caminando sin rumbo… por que ahora solo tenia las de perder.

Llorando bajo la lluvia… esta todo mi ser sentía Bill.

Otro trueno se escucho, haciendo eco en toda la ciudad, la gente corría apresurada para no mojarse, enfermarse o simplemente porque tenia prisa.

La marca en su brazo aun seguía ahí… sus amigos ya sabían lo que había hecho veces anteriores… tal vez esta ocasión se le había pasado la cantidad.

Era un juego… solo eso, una distracción de tanto dolor…algo venenosa la distracción pero siempre efectiva…aunque se necesitara un poco mas de veneno cada vez.

Una gota mas… miles de gotas caían en el cuerpo de Bill, pegando aun mas la ropa a su cuerpo, con la mirada perdida hundida en las zanjas de cadáveres de recuerdos perdidos, dando pasos en las calles encharcadas, los autos pasaban con velocidad, mojándolo con agua sucia.

Así se sentía…tan sucio.

Porque todos los sonidos que rodeaban la ciudad… le hacían crear una melodía tan melancólica… tan triste, tan…patética.

Entre edificios de cemento frió, podía escuchar los desgarradores gritos de la guitarra y el compás de los autos…

La vida parece tan fría estando tan solo… y cuando pensé que estarías aquí en casa, pero al verme tan culpable ante ti…Pensaba Bill

Un crimen sin perdón, destruyendo a mí otra mitad…

¿Algo para salvar mi alma? Que más da…

Mi razón eras tú… arriesgándome a todo por nada… y con la nada me he quedado enamorada de mi miserable existencia…solo con la soledad.

Las luces pasan rápidamente…. Pensó bill.

Perdido en el corazón de mis pecados, una prisión por siempre seré yo mismo. ¿Que? ¿Alguien pueda brindarme algo por lo que pelear? Lo dudo.

Atado a la condena de verte por toda la eternidad, en mi reflejo, en mis ojos, en mi piel, estarás tú… mi más grande pecado.

Me odias… me alejas, me rechazas, me detestas…estoy solo, estoy tan solo.

Cayendo en mi pasión… tú me odias.

Una mas de mis canciones tristes… queriendo gritar en medio de esta ciudad.

Te busco pero se que no te encontrare… buscando mi razón, mi razón, te necesito, te deseo, te anhelo, te quiero aquí junto a mi, pero no te tengo, no me puedo acercar mas, tu… quieres tenerme lejos… de ti. Se detuvo frente a un edificio que tenia en cada ventana... esos espejos de doble vista.

Bill puso su mano sobre el reflejo de su propia mano.

Recargando su frente… una pequeña sonrisa se formo en sus labios.

Y empezó a susurrar –“¿Que mas me queda?... Me pierdo en esta melancolía… ahogándome en lagrimas”—Miro otra vez su reflejo

-“¿Que mas puedo hacer? Tu jamás regresaras…”—Dijo con mas lagrimas saliendo desde el fondo de su alma –“Tenia la vaga ilusión de que te quedarías conmigo… viví totalmente equivocado… ¿verdad?”—Se retiro de aquellas ventanas

-“Lo mas bello que siento… es aun así lo mas repugnante…”—Dijo teniéndose asco a si mismo, se odiaba tanto…

Saco de una de las bolsas traseras de su pantalón, un pequeño croquis, de una lugar… y unas cuantas líneas que estaban abajo, el trago difícilmente la saliva… como esperando lo peor… guardo aquel papel de nuevo en su bolsillo, tomando el rumbo hacia aquel lugar.

Los chicos llamaron a su agente, Georg también llamo a la policía para que lo empezaran a buscar... pero le dijeron que tenían que pasar 48 horas… Georg se frustro y colgó el teléfono, Gustav llamaba también a algunos conocidos en la ciudad por si lo veían, Tom llamo al celular de Bill pero ¡él no lo contestaba!

Iba a llamar a su madre… pero luego se arrepintió…seguro Bill solo había salido, pero lo tenia muy preocupado, ya no sabia lo que su hermano podía hacer… o tal vez si lo sabia pero… no podía creer que fuera capaz.

Tomaron sus chaquetas, las sombrillas, se separaron para buscar a Bill, que al parecer no estaba nada bien como se miraba todos los días.

-“Chico gay!”—

Porque esa palabra… ese insulto que le decían tanto a su hermano de pequeños volvió a su mente…

-“CHICO GAAY CHICO GAAY”—Gritaban todos los niños burlándose de Bill teniéndolo en una esquina, aventándole bolas de papel y algunos hasta comida, bill solo se hizo bolita en un rincón, hasta que de pronto entro tom a aquel salón, golpeando al que suponía como siempre, había empezado todo

-“¡Deja de meterte con mi hermano!”—Dijo al abusivo el mayor, golpeándolo en la cara, haciendo que se le rompiera la nariz y empezara a sangrar, todos los demás se le quedaron viendo –“¿¿¿Que??? ¡Lárguense de aquí si no quieren que les parta la cara a ustedes también idiotas!”—Todos corrieron

Los sollozos de bill empezaron a hacerse menos… miro asustado hacia donde habían estado todos, y miro a su hermano, el se acerco a Bill

-“Tonto… ¿ahora que hiciste?”—Bill no dijo nada, solo se abrazo a su hermano

-“Por eso era por lo que no quería que nos cambiaran de salones”—Le dijo a su hermano mientras lo abrazaba fuertemente, dejando que su hermanito llorara en su hombro

Bill se había pintado los ojos y sus uñas, el chico que siempre lo había molestado no desaprovecho la oportunidad, e influenciando a todos los demás, hizo que humillaran de esa forma a su hermanito.

-“Snif snif… es que estando juntos… somos invencibles”—Dijo rodeando con un poco de menos fuerza el cuello de su hermano mayor

-“¿Que harás cuando no este para defenderte Bill?”— Le dijo su hermano mayor

-“NOO! Eso nunca va a pasar…tu y yo siempre estaremos juntos”—Tom sonrió por la manera en como dijo eso su hermano

-“Pero aun así…debes defenderte, no se cómprate un tubo”—Bill hizo un ruido en forma de puchero, luego se separo de su hermano sonriendo como siempre

-“Gracias… ¡¡para la otra ven antes!!”—Le regaño Bill dándole un pequeño empujón a su hombro a su hermano mayor

-“¡Oye! Así me agradeces ¬¬ tengo otras cosas importantes que hacer…”—Dijo señalando a las chicas

-“Ja… ¿ellas son mas importantes que yo?...”—Dijo ahora sonriendo tristemente el pelinegro

-“¿¿Quien ha dicho eso?? Aah eres mas melodramático que ellas tonto”—Dijo Tom acariciando el cabello de su hermano –“Dije que son importantes y me ocupan… no he dicho que lo fueran mas que tu, tu eres mi hermano, eres antes que nadie... ¡pero obvio antes que yo no!”—Bill lo empujo nuevamente, pero sonriendo como antes

-“¡Ven! Ahora vamos a planear la venganza para el gordo ese ¬¬”—Dijo Tom tronándose los nudillos, Bill sorno maleficiosamente xD, empezando a hablar sobre lo que le harían.

Entre los rostros, no miraba el de su hermano, ya se había cansado de andar corriendo de un lado para otro, se puso bajo una tienda, tomo aire y se empezó a calmar… nada ganaría poniéndose histérico al no encontrar a Bill, aunque pensara que a veces no quisiera encontrarlo…

El reloj ya marcaba las 12…¿¿donde se había metido?? Pensó tomando el camino otra vez, preguntando a cuanta gente pasaba por su hermano. No estaba… nadie lo había visto, como si la tierra con la lluvia lo hubiera deshecho y mandado al subsuelo.

Hasta que una chica se acerco a el –“Buscas a un chico con el cabello algo largo… con ojos pintados y con ropa algo… ¿ajustada?”—Tom asintió, alegrándose de que alguien sabría de su hermano –“Después de que se quedara frente a ese edificio, camino hacia el norte... hacia allá hay muchas bodegas…tal vez este ahí”—Tom la abrazo en agradecimiento, tomo su celular llamando a sus amigos y corriendo hacia donde la chica le había dicho

-“Si…si que me han dicho, ¿¿que?? ¿¿Que como se si no me esta mintiendo?? ¿¿¿Que ganaría con eso???... no, noo, claro pero… aah! Pero es la única que lo ha visto... si se que hay muchos pero… AAH! Ustedes vayan hacia el norte, buscaremos por todo…si ya me han dicho que son muchas pero… ¡VAYAN Y YA!”—Exasperado Tom colgó, corriendo lo más que podía, para llegar a su destino…


Frente a una gran puerta oxidada estaba Tom, recuperándose de tanto correr. Por fin Gustav y Georg llegaron al lugar. Tom ahora posaba sus ojos en ellos y les decía –“Bien… el tal vez este dentro de alguno de todos estos lugares abandonados…encuéntrenlo… no se que esta planeando”—Dijo mirando al suelo

-“¿A que te refieres? ¿Que podría hacer?”—Pregunto Gustav curioso

-“¡Por favor Tom! Si supiéramos que pasa”—Tom suspiro, tenia que decirles… así sabrían que era importante buscarle, mas de lo que suponían

-“Bien… les contare, pero… no quiero que reaccionen mal, prométanlo”—Ellos asintieron, Tom se paro bien, mirando hacia el cielo, ya había dejado de llover, pero estaban plasmadas aun las nubes grises.

-“Óyeme Tom, que he dicho que tengo algo importante que decir”—Dijo Bill tratando de llamar toda la atención de su hermano, que estaba acostado en uno de los sillones, ojeando una revista

-“¿¿Que es tan importante que no pueda esperar?? Estoy descansando”—Dijo Tom, bostezando, y poniendo otra vez su atención a la revista, Bill se la quito y la tiro al suelo

-“¿¿Ahora si??”—Grito Bill pisoteando la revista

-“¿¿Ahora que te pasa?? ¿¿Que no te gusta esa revista?? Tengo mas ¬¬”—Dijo Tom, buscando entre los cojines de ese sillón otra revista, la cual Bill se la quito otra vez

-“¡¡Ya Tom!! ¿Solo dame unos minutos quieres?”—

-“¿Por que no esperas a que termine de leer la revista? ¿No puedes esperar?”—

-“¡No! ¡¡Llevo esperando años!!”—

-“Jajaja que exagerado”— Riéndose le dijo a Bill, seguro que no lo decía en serio

-“En serio Tom… llevo años queriéndote decir esto”—

-“Si es sobre mi ropa, no me interesa”—

-“Naa en eso ya me di por vencido… es algo mas, entre nosotros dos”—

-“Mm…eso de hacer un trío entre los dos y una chica, no me gusta mucho tampoco”—

-“¡¡JAMAS HARIA ALGO ASI!!”—Dijo asustando el pelinegro

-“Jajaja, yo pensando que ya te habías hecho divertido… ¿entonces? Habla ya”—Dijo Tom ahora sentado en el sillón, Bill se sentó a su lado

-“Mm… esto es difícil… para mi, pero, creo que ya me he preparado… aunque no se que pasara si… pasa lo peor”—

-“¿¿Estas embarazado?? Jajaja”—

-“¡¡¡Deja de bromear Tom!!! Esto es… importante para mi”—

-“Ok, ok, ya no te interrumpo, solo te escuchare, hasta que acabes”—

-“Bien… yo, durante años… pues…ya sabes que la relación entre tu y yo es muy muy imperante, especial, única”---Decía con dificultad el pelinegro, retorciendo una servilleta que tenia entre sus manos, y mordiéndose de vez en cuando su labio inferior

-“Pero…luego algo cambio, no se cuando exactamente, pero así paso… yo trate de olvidarlo pero no pude, pensé también que había confundido esto con otra cosa, pero no fue así…seguía y sigue aquí…y me esta matando el no decírtelo…decirte que… ¡que te amo Tom! Estoy enamorado de ti…”—Dijo Bill cerrando sus ojos, como si el cerrarlos hiciera que todo lo anterior desapareciera, como las imágenes que recibían sus ojos

-“Eso… es asqueroso”—Dijo Tom parándose de donde estaba, alejándose lo mas posible de su hermano menor

-“Tom… pero…”—Bill iba a pararse pero Tom grito

-“¡NO! ¡QUEDATE DONDE ESTAS! No te quiero cerca…”—

-“Yo… no pensé que reaccionarias así, Tom si quieres olvídalo”—

-“¿Que?”—Le dijo Tom gritándole –“Como olvidar que mi hermano… mi hermano gemelo dijo que ¡¡¡esta enamorado de mi!!! Bill…eres un enfermo, en serio que me causas… repulsión, como… ¡¡ ¿como puedes vivir con eso todos los días?!!”—

Bill empezó a llorar, sin poder evitarlo –“Entonces… ¿quieres que me aleje de ti?”—

-“¡¡Obviamente!! ¡¡¡No quiero que te hagas ideas raras!!! Primero… a mi me gustan las mujeres, ¿¿entendido?? Y aunque me gustaran los hombres... jamás me metería contigo, el solo pensarlo… ¡¡aaah!! Que asco”—

-“Perdóname”—

-“Lo siento Bill pero no puedo…esto... no, jamás podremos ser como antes…¿¿entiendes??”—

Bill se acerco a Tom sin que el se diera cuenta y le dio un beso en el borde izquierdo de sus labios, Tom lo tiro al suelo, Bill se golpeo la espalda y los codos, y un poco la cabeza, desde el suelo miro como su hermano se frotaba con violencia sus labios con su mano –“¡¡¡IDIOTA!!! ¡¡Te odio!! Jamás vuelvas a hacer algo como esto, ¿¿¿oíste???”—Bill solo se levanto y se fue caminando tranquilamente, aunque… ya se sentía muerto por dentro.

Tom se sentó mirando el techo, ahora estaba solo en ese lugar... tomo la revista pisoteada del piso.

Intento volver a leer… pero no podía, miles de ideas estaban en su cabeza… ¿¿ahora que pasaría??...

Georg y gustav se quedaron sin habla…

-“No puedo creerlo…”—Dijo gustav al fin

-“Si… yo tampoco lo creí cuando me lo dijo…”—Dijo Tom recorriendo cada lugar abandonado que alcanzaba sus ojos

-“Yo no hablo de eso…si no de la manera en que reaccionaste, además eso que siente Bill, se notaba… y mucho”—Regaño Gustav a Tom

-“'¿¿Que?? ¡Claro que no!”—Se defendió Tom

-“Esta vez… te pasaste Tom, como le hiciste algo tan horrible a Bill, es decir, ¿no crees que a el le costo enfrentarse a si mismo primero para decírtelo?”—Dijo Georg cruzando sus brazos, reconociendo todo el dolor que sintió Bill

-“¿Que? Y eso que importa, ¿¿que no entienden?? ¡Somos hermanos!”—Dijo Tom ya enojado

-“¿¿Eso que Tom?? Igual el amor es…algo único, me imagino que a ti no te gusto para nada eso, pero… por Dios Tom, no pudiste actuar... ¡¿¿mas sensible??!”—Dijo Gustav apoyando a Georg

-“Yo no…”—Tom… lo sabia perfectamente, pero...

-“Tom… la idea de ese tipo de relaciones, no es mi preferida, pero… igual debiste pensar también en él, él también pensó en ti al decírtelo, ¿eso no lo pensaste?”—Pregunto Georg a Tom

-“Parece que no”—Dijo Gustav

-“Como sea… Bill esta muy mal, debemos de encontrarle…quien sabe que hará en este estado”—

-“Si… ¡y tu también hazlo Tom! Aaah… en serio que a veces… no se que pensar de ti”—Dijo Gustav yéndose a otro lugar de donde había ido a buscar Georg

Tom solo se quedo parado… luego empezó a dar la búsqueda de su hermano… tenia que encontrarlo… ¡y rápido!


Cerro la puerta tras de el…

Girando la ruleta… escuchando como giraba… el reloj ya marcaba otra hora más…

Sonidos extraños empezaron a dominar el lugar, escuchaba claramente su respiración, su sangre… su palpitar.

Mi mente esta enferma… mirando el espiral, el metal en mi boca… besando mis labios… “¿Sientes miedo pequeña niña?” se pregunto a si mismo

Entre mentiras… ya no podré sobrevivir porque ya no me gusta el contrato de mi existencia, los miedos como gusanos se comen mi carne, ya no deseo mirar otro suicidio del sol

La piel me empieza a calar… algo rápido, algo mejor… que oler esto, pensó Bill

Girando otra vez la ruleta.

Pasando por sus labios el metal…

Sentía miedo… pero aun mas sentía el vació… la soledad, la desesperación, su odio…

Algo en el mundo esta terriblemente mal, porque yo lo estoy, ni un angel que me proteja, nadie que me ame, las mentiras ya no me brindan refugio… ruinas en mi cerebro y hielo en mi corazón, una canción con la sangre de las nubes…

Contando hacia atrás... luego hacia delante lentamente

6…5…4…3…2…1

Algo rápido…algo mejor…algo nuevo.

Contando hacia delante…luego hacia atrás

1…2…3…4…5…6

Esto será rápido, aunque mi dolor lo haga mas lento...alguien que me sustituya cuando esto termine… hasta las estrellas, no sentir que hay algo malo en mi.

No puedo contra este amor…

¿Que mejor que entregarte mi vida? Que a vivir en tu odio

El tomo uno de esos pedazos de metal y lo metió en aquella cosa de metal.

Contando lentamente

Uno…dos…tres

Y más lentamente bajando

Cuatro…cinco…seis…

Mi última canción, antes de oler mi propia sangre

Bajando en espiral hacia mi tristeza

Uno…dos…tres…

No será muy lento llegar a la línea recta

Cuatro…cinco…seis…

Girando otra vez aquella ruleta…

-“Juguemos… amor enfermo, a la ruleta rusa…será divertido”—

Cargo el arma, la puso en su boca y tiro…

Nada…

La cargo de nuevo…tiro

Nada…

Otra vez…ya iba en el tercero, tiro del gatillo...

Nada…

Ruidos se escuchan desde fuera… los ignoro tirando el gatillo

Nada…

Otra vez… no se rendiría

Nada…

Cargo nuevamente el arma… ya era el sexto

Ahí estaría la bala…

Una puerta se abrió… y el sonido de un disparo invadió todo el lugar...

Bang…

Tom… había entrado en esa habitación, viendo como su hermano se volaba los sesos…

Cayendo su cuerpo al suelo… el charco de sangre llego hasta sus pies, el se arrodillo al cuerpo sin vida, estaba en shock, lo beso... pero ya no habia vida…aun seguian sus labios calientes... pero no tenia alma, ya no tenia vida.

-“Por que… ¡¡MALDITOO!! Me has dejado solo…. Te odio…te odio…TE ODIO”--- Grito Tom, abrazando con todas sus fuerzas su cuerpo –“Perdóname… fui un estupido… vuelve…¿¿¿vuelve si??? Y… y te haré muy feliz… por favor… ¡¡¡BILL REGRESA!!! NO ME DEJES... ¡¡NO ME DEJEEES!!”—Lloraba Tom… sin creer todavía lo real e irreal que nos es la muerte… hasta que llega a nuestras vidas.

Georg y Gustav escucharon el ruido y los gritos de Tom…llegaron a aquella bodega, Gustav iba a entrar, pero Georg lo detuvo, ese tiempo seria para que Tom estuviera con el al menos un rato mas.

-“Que...¿¿que tengo que hacer?? Dime...hermano dime… estaríamos siempre juntos, ¿¿¿te acuerdas???... no… no bill, tu no estas muerto... no puedes...¡¡¡¡BILL!!!!”—Tom no pudo mas y comenzó a gritar todo tipo de cosas, Gustav por fin entro y lo separo del cuerpo de Bill –“¡¡¡Déjame!!! ¡¡¡Quiero estar con el!!! No lo entiendes… el no…el no esta muerto jajaja esto…esto es una broma ¿¿verdad bill?? ¡¡¡RESPONDEME BILL!!!”—Las lágrimas seguían en el rostro de Bill, el arma en su mano derecha, la parte trasera de su cabeza estaba deshecha.

Sangre…solo el olor a sangre, se percibía en ese lugar.

Georg llamo a una ambulancia y a la policía… también a los padres de los gemelos…ellos tenían que saberlo, antes que nadie.

Tom estaba volviéndose mas violento y descontrolado, solo sus padres podrían darle algo… pero solo algo de consuelo, porque tal vez, jamás se recuperaría.

En la otra mano de Bill…estaba una carta…con el nombre de su hermano, Gustav saco como pudo a Tom afuera de aquel lugar, Georg tomo la carta… ahora no era el momento adecuado para que Tom leyera algo escrito… por su ya, muerta mitad.

Todos estaban vestidos de negro en aquella iglesia… llorando desconsoladamente, afueras de aquel lugar, estaban todas las fanáticas de la banda, destrozadas en dolor de que muriera tan prematuramente…Bill Kaulitz.

-“Jamás…volverás”—Pensaba Tom, mirando el cuerpo sin vida en aquel ataúd

Muchos de sus familiares y amigos fueron a decir algunas palabras para el, mencionando el suicidio… pero desconociendo el porque lo había hecho, solo sus padres, y sus mejores amigos sabrían esa respuesta.

Y por supuesto… el que sentía que sufría algo peor que la muerte en el instante que miro por última vez a su hermano con vida…Tom

Las notas del órgano comenzaron a escucharse otra vez, andreas estaba a lado de Tom, tocando su hombro…hasta en esos momentos Tom se hacia el fuerte, pero Andreas sin perderle permiso lo abrazo y Tom comenzó a llorar otra vez…ahora era turno de andreas para hablar, se separo de Tom… y se dirigió arriba.

-“Para mi bill fue mas que mi mejor amigo…fue como mi hermano… lamento tanto que haya muerto… y mas de esta forma, no lo critico, no se lo replico, ni se lo reclamo. Fue…algo que tuvo que pasar, no se la razón… pero se que debió ser así. Nos duele mucho su partida… pero y nosotros… ¿que podremos saber de lo mucho que le dolía a él su alma? No justifico nada, solo, pónganse a pensar. Piensen… en los bellos recuerdos junto a el, y el seguirá vivo. ¿Por qué?…. ¿Porque lloran? ¿Porque el esta muerto?… o ¿¿por lo que ustedes lo necesitan??... quien sabe… no soy nadie para decir que él esta mejor en donde quiera que este, pero él lo pensó así, y como siempre, yo apoyo a mis amigos en sus decisiones…en lo que les haga sentir bien, yo… Bill, no sabes lo que me duele el que no estés aquí conmigo, pero… siempre vivirás en mi, como en todos los que te conocimos…”—Andreas no pudo mas, se cubrió los ojos con sus manos y comenzó a llorar, recargándose en donde se había parado…gimiendo de dolor.

Ahora era turno de sus demás amigos y parientes cercanos, también su padre dijo algunas palabras para su hijo, como despedida.

Por ultimo… paso Tom, lentamente, se quedo ahí parado frente a esas personas, con la mirada perdida.

Luego miro a su hermano… tan hermoso como cuando estabas vivo…Pensó Tom… será que la misma muerte se ha enamorado de ti… y envolviéndote en tristeza y desesperación…con ayuda mía, ¿te ha hecho su amante?... Acabo preguntándose Tom, con su mirada siempre fija en el rostro de su hermanito.

Porque… ¡¿¿por que Bill??!... perdóname, esto fue tanto mi culpa…Pensó Tom, por fin dirigió su mirada a los demás, tomo su guitarra y empezó a tocar una melodía a su hermano.

Una balada… al comienzo de su miserable existencia…

-“Tal vez jamás cumplí perfectamente alguna de las promesas, y la palabra por siempre es demasiado grande para un mortal, pero ahora que estas abrazado por la frialdad, lo se… y ¿que hay de todo lo que no nos dijimos? ¿De lo que no viviremos? De las sonrisas que jamás veré en tu rostro…. Yo trato de no recordarlo, pero teniendo tu cuerpo en mis brazos… ¡¿como no sentir las ganas de seguirte?!”--- Tom se detuvo un momento para no comenzar a llorar otra vez

-“¿Que hay… de la promesa de estar siempre juntos? Me has dejado aquí, pero no puedo escaparme de tu fantasma…que esta mi mente… que esta en mi corazón, que esta en mi rostro…en mi”—

Todos miraban atentamente, y escuchando la dolorosa canción compuesta para su hermano

-“Caigo lentamente al mismo espiral…caigo. Yo he muerto de una manera mas dolorosa de la que podrías imaginarte, porque siempre tu fantasma me seguirá, estas vivo en mi, no podré escapar… pero… ¿como saber si estaremos juntos otra vez?... esto no lo puedo creer, se me hace tan irreal, que al despertar no te veré a mi lado… y por mas que busque jamás serás tu… estarás sepultado a metros bajo tierra”---

Tom miraba ahora hacia el techo de aquella enorme iglesia

-“Por favor…vuelve, queda tanto para nosotros dos… yo… no quiero… ¡no quiero estar aquí si no estas conmigo!”—acabo Tom diciendo, acabando esas melodías, tirando su guitarra a cualquier rincón del lugar y abrazando el cadáver de su hermano

-“Volvamos a casa… ¿¿si?? ¡Quédate conmigo! Por favor Bill”—Seguía llorando desesperado y susurrándole, todos se le quedaron mirando como si ya se hubiera vuelto loco, otros con compasión y pena, Andreas lo tomo y alejo del cadáver de Bill –“No Andreas por favor déjamelo… quiero abrazarlo… no…”—Tom ahora abrazaba a Andreas –“¡Fue mi culpaa! Lo deje solo cuando…el...el me necesitaba y yo…¡¡YO!!”—Andreas lo abrazo mas fuertemente, su madre también fue a abrazarlo

Luego lo sacaron para enterrarlo… la lluvia no cesaba, desde ese aquel día en que todo paso no había dejado de llover.

Tom…con su smoking negro… sin su gorra, solo con sus rastas agarradas en una coleta, con sus ojos tan rojos… no paraba de llorar, aunque le dolieran sus ojos, no podía detenerlo

Al empezar a bajarlo… Tom se tiro al ataúd, intentando detenerlo, Georg y Gustav lo agarraron –“Suéltenme, no puedo dejar que se lo lleven ¡no puedo!”—Gritaba Tom

-“Tom tranquilízate ¡por favor no lo hagas mas difícil!”—Decía Georg tratando de tranquilizarlo

-“Sabemos que es difícil pero…”—Le menciono Gustav, Tom no dejaba de forcejear y Georg le pego en su mejilla

Tom se toco en donde lo había golpeado y se calmo…mirando con sus ojos vacíos como lentamente lo bajaban en aquel agujero.

Los padres de los gemelos y Tom, echaron los primeros montones de tierra, después los demás.

Pasaron las horas, y empezaron a irse…

Ya solo quedaban los padres, Tom, Georg, Gustav y andreas.

-“Lo tuve... muerto…entre mis brazos…lo mire en ese instante…frente a mi, con sus ojos cerrados, los abrió por un instante…mirándome, y jalo el gatillo yo… debí…yo...”—Tom hablaba con la voz entrecortada

Sus padres lo abrazaron –“Hijo… desahógate…todo estará bien, ya veras que podremos con esto”—Decía su madre, acariciando el rostro de su hijo

-“Hay que ser fuertes, eso querría Bill…¿que crees que te diría viéndote llorar de esta forma Tom?”— Dijo su padre

-“Seguramente… se reiría… desearía…verlo sonreír”—Dijo llorando otra vez

Georg, Gustav y Andreas, pensaron que estorbaban en aquel lugar, se despidieron de la familia Kaulitz, para irse en algún auto a sus casas…

-“Chicos... ¿podría estar con ustedes?”—Pregunto Andreas

-“Claro… mama, estará gustosa de tenerte a ti y a Georg en casa, ya sabes como le gusta preparar comida”—Dijo Gustav tratando de hacer una sonrisa

-“¿Se pondrá bien?”—Pregunto Georg mirando hacia donde estaba Tom con su familia

-“Esperemos que si… le daremos todo nuestro apoyo”—Dijo Gustav subiendo al auto, con los otros dos siguiéndolo

-“Tal vez… ni eso sea suficiente”—Dijo Andreas preocupado –“Esta herida… no es una herida… mas bien... es una mutilación, de todo su ser”—Dijo cerrando la puerta, el auto se puso en marcha

Tom sabia muy bien que el no podría, no se sentía capaz de vivir sin su gemelo… pero no podría decir algo tan directo a sus padres, estaban suficientemente dolidos por lo que paso, no soportarían tan pronto otra muerte… no, no moriría, no podía…sus padres lo necesitaban… sus amigos…

Pero… ahora no les veía tanta importancia, no la que debían… Bill ya no estaba, y así todo lo hallaba sin sentido… sin razón de ser.

“Cuanto tiempo soportare en este cruel mundo sin ti…hermano” se preguntaba mentalmente Tom… sus padres decidieron estar en el auto, mientras que Tom se sentaba junto a la tumba de su hermano… tarareando todas las canciones que Bill había escrito

-“¿Te acuerdas…cuando me presumiste esta canción? Dijiste…seguro que cuando seamos una banda…será nuestro primer éxito…con tu sonrisa… con tu animo… te extraño tanto Bill… apenas unos días sin ti… y ya me siento… siento que no podré mas… te necesito junto a mi Bill…”—Tom sin detener su llanto, comenzó a tararear otra canción, luego tirándose sobre la tumba, grito desesperadamente.

Dándose cuenta de la impotencia… de su pequeñez, de que solo era un simple ser humano, que no podía contra la majestuosidad de la muerte y de la vida…que continuaba, que parecía tan gris sin su otra mitad.

El anochecer llego…y tom seguía ahí…pegado a la tumba… sus padres se preocuparon, pero lo dejaron… era una manera sana... pensaron, de combatir su perdida, era su duelo, no querían que cayera en el sufrimiento por toda su vida.

-“Mira...ya es de noche…estaré junto a ti… como cuando dormíamos juntos… aunque…fue antes de…tu sabes, que me dijeras…perdóname…se que fue mi culpa…lo se”—

Las horas pasaban… el ambiente se hacia sombrío… y Tom sentía mas de una presencia tras suyo todo el tiempo…. Tenia miedo si, pero no se alejaría de su hermano

El sol ya comenzaba a alzar sus rayos por el cielo… y el…junto a la tumba de su gemelo…seguía, ahí…quieto…

Así pasaron justos tres días… Tom cayo desmayado al fin, sus padres lo obligaron a comer, pero el lo escupía, trataron llevárselo pero fue imposible… hasta que el cansancio lo venció… y al despertar se encontraba en su casa…ya no mas hoteles, solo su habitación de la niñez.

Escucho las voces de sus padres que estaban fuera de su habitación –“Me quedare unos días mas… el esta muy mal, no quiero que haga alguna tontería”—Escucho decir a su padre, seguía mirando el techo de su habitación, con esas estrellas que su hermano había pegado… recordaba que cuando los pusieron en habitaciones distintas, Bill se iba de puntitas a la habitación de Tom, y como le daba miedo la oscuridad, y le encantaban las estrellas, un día Tom se las compro y las pusieron juntos en el techo.

Se cubrió su cabeza con las cobijas un rato… pensando en como asustaba a Bill diciéndole que el monstruo vendría pronto que se escondiera… -“Bill… no puedo vivir sin ti… mi corazón es...solo pedazos de hielo...solo pedazos…”—Ya no podía llorar mas, solo ruidos de dolor salían de su boca… sus lagrimas se habían secado… ya no tenia corazón, solo dolor…

-“Pueden entrar un rato… el esta muy mal, por favor… espero que lo ayuden”—Era la voz de su madre… la puerta se abrió lentamente, eran Andreas, Georg y Gustav…

-“¿Estas despierto viejo?”—Pregunto Georg

-“Mh...”—Respondió Tom

-“Venimos a hacerte compañía un rato… ¿quieres algo de comer?”—Dijo Gustav acercándole un plato con galletas

-“No... No tengo apetito”—Dijo Tom, descubriéndose la cara de las cobijas

-“Pero tienes que comer algo… hazlo Tom, por nosotros…solo un poquito”—Dijo Andreas, dándole una galleta, Tom la agarro y le dio una mordida

-“¿Hay algo que podamos hacer por ti?”—Pregunto Georg después de un incomodo silencio, donde solo se escuchaban sus respiraciones y el masticar de TOm

-“Si… tráiganme algunas cosas… no me pregunten ni me den excusas…solo háganlo ¿de acuerdo?”—Dijo Tom después de acabarse la galleta

-“Claro… ¿que cosas?”—Pregunto Gustav

-“Pues…”—Tom comenzó a decirles…los chicos se miraron entre ellos, pero lo habían prometido…así que empezaron a llamar a algunos lugares

El sonido de una guitarra acústica era la música de fondo… un chico… alto, de cabello negro con algunos rayos de color rubio… muy pálido, casi blancos…con sus ojos delineados de negro, estaba parado en la cima de el edificio mas grande de toda la ciudad.

Con sus pantalones de mezclilla…entallados a sus piernas delgadas…con su playera negra, con un cráneo rojo estampado… alrededor…su cinturón, en el pantalón, con una gran hebilla color plateado.

Varios collares adornaban su cuello, anillos en sus dedos…sus uñas de color negro y blanco en sus puntas…su cabello un poco esponjado, no mucho…sus labios entre abiertos…sus ojos tan rojos.

Estando al borde de aquel edificio… abajo estaban los bomberos, unos policías con altavoces, sus padres… sus amigos, otro montón de personas que le eran desconocidos… pero tal vez ellos ya lo conocían mucho antes… pero no tanto como creían… a lado del chico… estaba otra persona, sentada.

-“¡MUCHACHO! NO LO HAGAS, TIENES MUCHAS COSAS POR LAS QUE VIVIR”—Decía uno de los policías tratando de convencerlo, seguro que mandarían a alguien para hablar con el a la azotea, el había pensado en eso y atranco la puerta para que se tardaran un buen rato

-“¡DETENTE! PIENSA BIEN LAS COSAS, ES LA DESESPERACION… PERO VERAS QUE ENCONTRAMOS OTRA SALIDA”—

El otro chico se paro de pronto… poniéndose a un lado del de cabello negro

No se movía ni un centímetro el pelinegro, miro hacia abajo otra vez, luego hacia delante… y finalmente arriba… al cielo de esa ya tarde…

-“Moriré a la misma hora…otra vez”---Se dijo a si mismo el pelinegro

Luego empezó a susurrar unas palabras…mientras que en la puerta que daba a la azotea se escuchaban golpes.

El otro chico le tomo la mano

-“Déjame caer… y escalar hacia ti, …estoy seguro…ya es el momento… en el que mis sueños y miedos… tienen un mismo rumbo… ya no se quien soy si no existes en mi realidad… el único que podría atraparme. Así que déjame caer… por favor déjame caer… no escuchare sus advertencias… no… ¡no los escuchare!... déjenme caer…déjenme… a un lugar libre…”—El chico detrás suyo se pego mas a el

-“Un lugar donde pueda cantar… sin temer que mi voz se pierda en el recuerdo de ti, espere por tanto este momento de enfrentar mi miedo…cambiar mi miseria… por estar de nuevo… aquí… ahora….”—

El otro chico le tomo fuertemente la mano… y el pelinegro volteo…ahí estaba el…

-“Piensas en verdad… ¿hacer esto?”—Le pregunto el chico al pelinegro

-“Por supuesto… no pienso perderte… ¿lo entiendes? Te entrego lo único valioso en este mundo que me queda… mi vida, mi alma, todo que pueda poseer el que siga respirando… que mas da a donde vaya… sin ti, donde este… es la nada”—Dijo mirando al chico

-“Pero… prefieres esto… a quedarte y seguir… que no era lo que tu…”—

El pelinegro puso sus dedos en los labios de aquel chico –“Se bien… lo que dije…fue un error… yo… tu sabes ahora que yo…”—El chico sonrió…

-“No eres una alucinación…como todos piensan… ¿verdad?”—Pregunto el pelinegro

-“Si te digo que si, no me creerías, mas si te digo que no lo soy… seria que es lo que quieres oír o ¿la realidad?”—Pregunto el chico

-“Yo… estoy seguro de que eres real…tenemos…algo mas allá de la muerte… puedo escucharte…se que estas aquí, no es que este loco... lo se”—Dijo acercándose al chico, y abrazándolo, lo sentía tan…frío

-“Entonces…estaré contigo”—El chico le tomo su mano al pelinegro

-“¿Porque… te has vestido como yo?”—Le pregunto el chico…esa figura, ese chico… el fantasma de Bill, que tenia la ropa que uso el día que se suicido… tenia sangre en esas ropas… y en su cuerpo

El pelinegro a su lado sonrió –“Tenia que verte… tenerte conmigo aunque fuera en mi mismo…y fue difícil… hacer mi imagen tan idéntica a ti…pero así… te tendría en el espejo una vez mas, y besar algo tan frió como tu cadáver…el espejo”—El fantasma de Bill tomo mas fuertemente su mano

-“¿Como es que puedo sentirte Bill?”— Pregunto Tom…ahora vestido e idéntico a Bill cuando estaba vivo

-“No lo se… pero ahora es tiempo de dar el paso… para estar juntos…siempre...como lo prometimos…”— Dijo el fantasma de Bill… --“Y… sabes que te perdono...jamás te odie… te seguí amando cada segundo… hasta el final”—

-“Bill… yo”—

-“Ya no importa Tom… demos el paso”—

La puerta de la azotea por fin fue abierta, pero ese chico dio el paso hacia el vació…cayendo rápidamente a la acera de la ciudad, destruyendo su cuerpo… sus padres se quedaron viendo horrorizados, al igual que sus amigos y las fans…

Andreas se esperaba algo así… luego miro entre la gente… las espaldas de quien... parecían ser las de… ¿¿Tom y Bill?? Se hizo paso entre la gente, mientras que la ambulancia recogía el cuerpo, y si... al fin ya a lo lejos de tanta gente… eran Bill y Tom… tomados de la mano felizmente… pero rodeados de una luz negra, Bill volteo a donde estaba Andreas y de igual forma lo hizo Tom.

-“Ustedes…son solo… ¿mi imaginación?”—Los gemelos se acercaron a él

-“Solo de una forma podemos estar juntos… y es justo allá abajo”—Dijo señalando el piso Bill

-“Entonces…ustedes dos”—Dijo Andreas sin podérselo creer

-“No me importa en donde este…mientras este con él…si tuve que mandar mi alma allá… es un precio bajo por estar con lo único que para mi… importa… además, ambos tal vez... lo merecemos…”—Las dos figuras desaparecieron cuando Georg y Gustav se acercaron a Andreas… que se había quedado en shock.

ayy MK
TE JURO QUE PENSE QUE ERA TWINCEST!!!
PERO PSS MUY BONITA MI SIS
QUE AMOR DE HERMANOS!!